Conectando Continentes: Un Contraste entre el Corredor Bioceánico y el Corredor del Istmo de Tehuantepec

El pasado 1 de diciembre de 2023, en el marco de la COP28 se suscribió la “Declaración Conjunta sobre Cooperación vinculada al Corredor Bioceánico”, entre Paraguay, Argentina, Brasil, Chile y Emiratos Árabes Unidos, asistieron los presidentes de los Emiratos Árabes Unidos, Paraguay y Brasil.

El acontecimiento marcó la colaboración entre naciones sudamericanas y de Medio Oriente. Los presidentes de Paraguay, Santiago Peña; de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva; y de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed bin Sultan Al Nahyan. Se reunieron en Dubái para la firma de la declaración conjunta sobre el Corredor Bioceánico. Este proyecto de infraestructura busca unir las costas del océano Pacífico en Chile con la costa del océano Atlántico en Brasil.

Desde su concepción en 2015, el Corredor Bioceánico ha sido impulsado por Argentina, Brasil, Chile y Paraguay, quienes comparten la visión de conectar hasta cuatro puertos a través de una extensa autopista. Esta iniciativa no solo busca acortar distancias geográficas, sino también detonar el desarrollo en una región para superar barreras y construir un futuro con prosperidad.

La importancia de este corredor va más allá de conectividad física. Se erige como un símbolo de la capacidad de los Estados nacionales para colaborar en la construcción de infraestructuras que beneficiarán a las próximas generaciones En un contexto en el que las divisiones y conflictos parecen ser una constante. No obstante, el Corredor Bioceánico destaca como un ejemplo inspirador de cooperación.

Un aspecto de este proyecto es el potencial para fomentar el comercio y el intercambio económico. Al unir dos océanos y facilitar la conexión eficiente entre puertos estratégicos, se abren nuevas oportunidades para el intercambio comercial, impulsando el crecimiento económico y fortaleciendo las economías de los países participantes. Además, la generación de empleo y la inversión en infraestructura local contribuirán al bienestar de las comunidades a lo largo del corredor.

El Corredor Bioceánico también ofrece una oportunidad única para abordar desafíos medioambientales y promover prácticas sostenibles. La planificación estratégica de la infraestructura y la implementación de nuevas tecnologías son una alternativa para mitigar los impactos ambientales y garantizar que el desarrollo equitativo.

La relaciones diplomáticas y voluntad política sin símbolos para hacer realidad proyectos de trascendencia. La colaboración entre naciones, independientemente de su ubicación geográfica y aspectos culturales, muestran que cuando hay un objetivo común, las diferencias pueden superarse anteponiendo un bien mayor.

Al mismo tiempo, en México, avanza la Plataforma Logística del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, ofreciendo una ruta alternativa entre el Atlántico y el Pacífico. De modo que,

El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec y Corredor Bioceánico en Sudamérica, son símbolos que muestran los avances geopolíticos y geoeconómicos para ser competitivos con infraestructura de transporte y logística global, con un potencial para el comercio internacional.

El Corredor del Istmo de Tehuantepec, se destaca por su enfoque multimodal, integrando puertos, ferrocarriles, carreteras y aeropuertos. La integración, como modelo de desarrollo, facilita el movimiento de carga entre los océanos Atlántico y Pacífico, Proporcionando una opción más eficiente y rentable que el Canal de Panamá, especialmente, en el caso de determinadas rutas y categorías o tipos de carga.

Los Polos de Desarrollo para el Bienestar, no solo impulsarán la economía regional sustentable atrayendo inversiones, generando empleo, sino que diversificarán la base económica del país, fortaleciendo sectores y las once vocaciones productivas entre las que destacan la automotriz, agroindustria y petroquímica.

Ambos proyectos tienen en común la cooperación internacional para el desarrollo de infraestructuras y las alianzas estratégicas entre diversas economías. Los beneficios tienen impactos positivos más allá de las regiones territoriales que las integran. Son proyectos que tienen la capacidad de adaptarse a las exigencias de una economía mundial que busca tener rutas de comercio alternativas, eficiencia en el transporte de mercancías para reducir costes

El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec y el Corredor Bioceánico en Sudamérica son ejemplos de que la globalización tiene efectos positivos para desarrollar regiones y países.

Diez claves para entender el Corredor Bioceánico y Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.

 

  1. Dimensiones geográficas:

Corredor Bioceánico: Conecta el sur de Brasil con los puertos del norte de Chile, atravesando Paraguay y Argentina.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: En México, facilita la conexión entre los océanos Atlántico y Pacífico.

 

  1. Impulsores del proyecto:

Corredor Bioceánico: Argentina, Brasil, Chile y Paraguay han sido impulsores desde 2015.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Impulsado por el gobierno de México, asignado a la Secretaría de Marina con el objetivo blindarlo de intereses ajenos y poder cumplir con sus objetivos de diversificar la economía y fortalecer sectores clave.

 

  1. Enfoque Multimodal:

Corredor Bioceánico: Aún en desarrollo, se prevé una infraestructura terrestre.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Destaca por su enfoque multimodal, integrando puertos, ferrocarriles, carreteras y aeropuertos. Más de 1,200 km de vías ferroviarias, carreteras y aeropuertos, optimizan la logística, generan oportunidades y fortalecen la posición estratégica de la región en el mundo.

 

  1. Eficiencia Logística:

Corredor Bioceánico: Busca mejorar la eficiencia logística conectando los océanos a través de una ruta terrestre.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: integrada por servicios portuarios, interconectados por el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec y el sistema carretero nacional.

 

  1. Desarrollo económico regional:

Corredor Bioceánico: Gabriel Boric destaca su potencial para propulsar el desarrollo en la región.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Polos de Desarrollo para el Bienestar fortalecerán la actividad industrial, se ofrecerá una alternativa moderna y eficiente para el comercio regional y mundial.

 

  1. Colaboración Internacional:

Corredor Bioceánico: Participación de los Emiratos Árabes Unidos subraya la cooperación internacional.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Colaboraciones entre México y otras economías reflejan la importancia de alianzas estratégicas.

 

  1. Comercio Global:

Corredor Bioceánico: Busca potenciar el comercio entre América del Sur, Asia y otros mercados globales.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Ofrece rutas alternativas y eficientes para el transporte de mercancías a nivel global. México puente natural entre el Atlántico y la región Asia-Pacífico. Además conectará con Estados Unidos, América del Sur y Europa.

 

  1. Reducción de Costos:

Corredor Bioceánico: Puede reducir los costos de envío y tiempos de tránsito.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Ofrece una alternativa más económica al Canal de Panamá.

 

  1. Desarrollo económico local:

Corredor Bioceánico: Atraerá inversiones y generará empleo a lo largo de la ruta planificada.

Corredor del Istmo de Tehuantepec: Sectores como la industria automotriz, agroindustria y petroquímica.

 

  1. Impacto en el Comercio Mundial:

Ambos corredores son motores de crecimiento y desarrollo, contribuyendo a una mayor estabilidad y prosperidad teniendo un impacto positivo en el comercio internacional (marítimo y terrestre). Tanto el Corredor Bioceánico como el Corredor del Istmo de Tehuantepec representan logros importantes de nuestro tiempo en infraestructura global de transporte y logística. Estos proyectos no solo transformarán las regiones, sino que también ofrecerán beneficios sociales, marcando una nueva era en la conectividad, el desarrollo económico sostenible y los derechos humanos.

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